«RODILLA DEL CORREDOR»
El síndrome de la cintilla iliotibial (SCIT) es una lesión muy frecuente en corredores y gente que hace ejercicios aeróbicos y funcionales.
La cintilla iliotibial (CIT) forma parte del tensor de fascia lata (TFL), con origen en la espina iliaca anterosuperior y se inserta a través de la cintilla en el tubérculo de Gerdy. Es una banda de tejido conectivo, fibroso, denso con capas superficiales y profundas que contribuye a la estabilidad lateral de la rodilla.
¿Qué es el Síndrome de la Cintilla Iliotibial?
El síndrome de la cintilla iliotibial (ITBS, por sus siglas en inglés) es una lesión que afecta a la banda iliotibial, un tejido conectivo que se extiende desde la cadera hasta la rodilla. Esta banda juega un papel crucial en la estabilidad de la pierna durante la actividad física, pero cuando se produce una fricción excesiva, puede causar dolor y malestar.
Causas del Síndrome de la Cintilla Iliotibial
El ITBS generalmente ocurre debido a un uso excesivo o repetitivo de la pierna, como correr largas distancias, subir y bajar cuestas o participar en deportes o actividades que involucran movimientos laterales. Algunos factores que pueden contribuir al desarrollo del síndrome incluyen:
Síntomas y Diagnóstico del Síndrome de la Cintilla Iliotibial
El síntoma principal del ITBS es el dolor en el costado externo de la rodilla. Este dolor puede ser agudo y punzante, y generalmente se experimenta durante la actividad física, especialmente al correr cuesta abajo o al subir escaleras. Algunos otros síntomas comunes incluyen:
Si experimentas estos síntomas, es importante buscar atención médica para un diagnóstico adecuado. Tu médico o profesional de la salud realizará un examen físico y puede recomendarte pruebas adicionales, como resonancias magnéticas o radiografías, para descartar otras posibles lesiones.
Síntomas del síndrome de la cintilla iliotibial
El síndrome de la cintilla iliotibial (SBIT) es considerado como una lesión por sobreuso y una de las principales causas de dolor lateral en la rodilla en corredores.
El diagnóstico es fundamentalmente clínico, las características principales son dolor agudo (con sensación de quemazón) localizado en la cara lateral de la rodilla, que aumenta en la flexión de rodilla, a la palpación y en ocasiones existe sensación de crepitación en la flexo-extensión.
Inicialmente la sintomatología empieza tras unos minutos de ejercicio físico y desaparecen poco después de finalizar la actividad, pero estos síntomas pueden ir en aumento progresivamente pudiendo aparecer en actividades cotidianas como bajar escaleras y permanecer sentado durante un tiempo prolongado. Sería importante realizar un diagnóstico diferencial con lesiones de menisco externo, artrosis del compartimento externo, hiperpresión lateral externa de la rótula y tendinopatías del bíceps femoral.
Causas de la lesión de cintilla iliotibial o rodilla de corredor
Para determinar el tratamiento más efectivo del síndrome de la cintilla iliotibial, primero deberíamos adentrarnos en la etiología de la lesión y los factores desencadenantes. La dificultad que puede entrañar es la controversia existente sobre el origen de la lesión en las distintas publicaciones científicas.
Tradicionalmente se ha considerado que el causante del síndrome es una fricción de la CIT con el cóndilo lateral del fémur, en los movimientos de flexión y extensión de rodilla.
Sin embargo, nuevos estudios anatómicos sugieren que la lesión no es consecuencia de la fricción, sino de la compresión que se produce, en los 30º de flexión de rodilla junto con una rotación interna de la tibial y abducción de cadera, con una capa grasa muy inervada que existe entre el cóndilo lateral del fémur y la CIT. Estos autores consideran que el tejido graso junto con fibras nerviosas y los corpúsculos de Pacini pueden estar implicados en el dolor del síndrome de la cintilla iliotibial.
Tratamiento y Prevención del Síndrome de la Cintilla Iliotibial
Una vez diagnosticado el síndrome de la cintilla iliotibial, existen varias opciones de tratamiento que pueden ayudarte a recuperarte y prevenir futuras recaídas. Aquí tienes algunas medidas que puedes tomar:
Además del tratamiento, es fundamental tomar medidas preventivas para evitar la recurrencia del síndrome. Aquí tienes algunas estrategias que puedes adoptar:
Recuerda, la prevención es clave cuando se trata de lesiones deportivas. Escucha a tu cuerpo, no ignores las señales de malestar y toma medidas proactivas para mantener tus músculos y articulaciones en óptimas condiciones.
Para el tratamiento del síndrome de la cintilla iliotibial, a pesar de la controversia sobre su etiología, es necesario tener en cuenta los posibles factores tanto intrínsecos como extrínsecos y realizar una evaluación individual de la sintomatología y características del paciente.
Para garantizar una buena resolución del síndrome es necesario realizar un diagnóstico e intervención individualizada y precoz. Se recomienda realizar un control de la inflamación y de los síntomas durante las primeras fases, y una reeducación del movimiento neuromuscular en fases posteriores con el fin de disminuir el dolor y mejorar la función.
El tratamiento conservador (crioterapia, ultrasonidos, masaje transverso profundo, reposo, etc.) enfocado a la disminución de la respuesta inflamatoria, el dolor y la disminución del nivel de actividad asociada con la aparición de la sintomatología, ha sido estudiado para determinar el uso clínico más apropiado bajo la evidencia científica, pero la escasa calidad y la heterogeneidad de los estudios dificulta conocer el beneficio terapéutico de estos.
Por tanto, existen grandes limitaciones para poder concluir que alguno de estos tratamientos oferte algún beneficio significativo en el síndrome de la cintilla iliotibial, a pesar de que se siguen utilizando en fase aguda y subaguda.